Frida Lizbeth Martínez Reyes, estudiante de sexto semestre en la Facultad de Ingeniería, tiene dos pasiones a las que dedica todo su tiempo: la gimnasia artística y la geofísica. En su gusto y esmero por la práctica deportiva influyó su madre y también su primera entrenadora, mientras que, en la vocación por la disciplina del ingenio, su padre, quien es ingeniero mecánico, la impulsó a ingresar a esta Facultad.

Si bien, el trayecto ha sido arduo por el sacrificio que significa combinar ambas actividades con fuertes cargas de trabajo, los resultados han valido la pena. El pasado 31 de mayo, en el Campeonato Nacional de Gimnasia Artística, realizado en la Sala de Armas de la Ciudad Deportiva, obtuvo cuatro medallas (nivel 7); de éstas las más emotivas fueron la del primer lugar en Piso y la de segundo por equipos en el representativo de la UNAM.

El nivel 7 en gimnasia, señala Frida, implica rutinas libres, música y coreografía propias, es la antesala de la máxima expresión de la disciplina, por lo que es muy meritorio su triunfo entre más de 40 gimnastas de todas las entidades federativas, además de un enorme orgullo recibirlo como representante de la UNAM, ya que, por su autonomía, nuestra universidad participa independientemente de la CDMX.

Los niños y jóvenes suelen idealizar a deportistas; Frida más que a figuras famosas, ajenas a la realidad de un estudiante mexicano, admira a Mariana Vázquez, arquitecta de la UNAM, y a Adrián Elías, egresado de Ingeniería Mecánica FI, quien actualmente realiza su doctorado en Reino Unido, ambos extraordinarios gimnastas que le demostraron con el ejemplo que es posible armonizar el estudio de excelencia y la práctica deportiva de alto rendimiento; por supuesto, a sus padres, luchadores incansables que le han transmitido la tenacidad para sortear carencias; a Lorena Galán, su entrenadora, persona de gran calidad humana, y a sus amigos gimnastas, compañeros incondicionales.

En cuanto a su formación académica, recuerda que cuando tuvo que elegir la carrera optó por la geofísica por la curiosidad de descubrir un campo de estudio desconocido, por ello, el inicio le resultó muy difícil, sin embargo, al avanzar y llevar las materias del área ha fortalecido su vocación al grado de vislumbrar una especialidad en astronomía o astrofísica: "Desde tercer semestre me llamó la atención cómo la física se puede aplicar al estudio de la Tierra, y su relación con la astronomía, en medio de la infinidad de cambios de nuestro planeta".

Para un buen rendimiento académico y deportivo, la clave para Frida ha sido saber evitar distractores propios de los jóvenes y administrar el tiempo: "Aunque los trayectos de mi casa a la escuela me toman tres horas de ida y tres de regreso, los aprovecho para leer; llevo materias desde muy temprano, entreno de 9 a 13:30 horas, y continuo con clases en la tarde; cuando compito, los profesores me adelantan exámenes y a veces durante el entrenamiento, en rutinas de flex, hago alguna tarea o estudio".

Comenta que su papá siempre comparaba una carrera de ingeniería con una novia celosa, a la que no se le puede descuidar en ningún momento: "Coincido con esta idea y la aplico también a la gimnasia, pues las dos son demandantes y a las dos las quiero".

Los conocimientos de física y en general de las ciencias básicas le han dado a Frida seguridad en la gimnasia y viceversa: "Cuando tengo que hacer algo nuevo, pienso, soy un cuerpo que está sometido a leyes físicas y si ejecuto correctamente no tengo por qué caer o lastimarme; asimismo, tener presente rutinas gimnásticas que he perfeccionado me motiva a salir adelante en las asignaturas más difíciles".

Frida, ya inquieta por atender sus actividades, se da tiempo para compartir la maravillosa sensación que significa subir al podio: "La mente te invade de felicidad desde que te acomodan antes de la premiación; estoy frente al primer lugar, mi corazón late al máximo, luego escucho mi nombre y el de la UNAM, entonces el orgullo se apodera de mí, un Goya que retumba y mi alegría se eleva hasta las lágrimas".

Frida tiene la convicción de continuar practicando la gimnasia hasta alcanzar el nivel 10 y concluir su carrera para realizar un posgrado: "Siendo una geofísica especializada regresaré a la UNAM y a la Facultad un poco de lo mucho que me han dado en lo deportivo y en mi formación".