Invitados por la División de Ciencias Sociales y Humanidades (DCSyH) de la Facultad de Ingeniería (FI-UNAM), el bajo Fernando Lozada Toxcoyoa y el contratenor Antonio Castro engalanaron con su canto el auditorio Javier Barros Sierra, acompañados en el piano por Martín de la Rosa, el pasado 5 de noviembre.
Este par de voces masculinas representan la maravilla del potencial humano en tonos y rangos, pues una se caracteriza por una agudeza natural y plena capaz de llegar hasta el punto más lejano del recinto, y la otra por proyectarse con gravedad, haciendo vibrar profundamente. Los intérpretes explicaron que es la morfología del cuerpo la que permite realizar estos tipos de tesituras opuestas, pero que igualmente importantes son la filosofía y la disposición de quien las posee.
El concierto fue un verdadero despliegue internacional con piezas francesas, alemanas, italianas, en náhuatl y en español, por mencionar parte del programa, lo que permitió al bajo y al contratenor dar salida a un rango de emociones en clave del repertorio operístico.
Fernando Lozada Toxcoyoa y Antonio Castro agradecieron a su maestra Alicia Torres Garza, coordinadora de la Academia de Canto del Conservatorio Nacional de Música de México, y a la DCSyH por la oportunidad de compartir su pasión y arte en un espacio universitario.
